Hoy en día, la mayoría de las viviendas que se construyen, apuestan por los platos de duchas antes que por las bañeras. Quizás haya mucha gente a la que le guste llenar la bañera y darse un baño de horas, pero la realidad es que estas personas son las menos. El ritmo de vida que llevamos y el hecho de economizar el tiempo hacen que darse una ducha gane por goleada. Pero no solo eso, cambiar tu bañera por un plato de ducha tiene muchas ventajas y hoy te las vamos a contar ¡Toma nota!
Ventajas de cambiar la bañera por un plato de ducha
Es un gran cambio, pero seguro que te alegras porque tiene muchas ventajas:
- Seguro que quieres darle un cambio de imagen a tu baño y has pensado en la reforma. No te preocupes la reforma para cambiar tu bañera por un plato de ducha es súper sencilla y rápida. No te darás ni cuenta que los albañiles han pasado por allí. Así que no te eche para atrás el hecho de hacer obras.
- Poner un plato de ducha es todo ahorro, de tiempo, de dinero y de recursos medioambiantales. Se gasta menos agua dándonos una ducha que llenando la bañera para darnos un baño. Además una ducha es más rápida, mientras que un baño tardamos mucho más tiempo en prepararlo.
- Los platos de duchas ocupan menos espacio que las bañeras. Por tanto es ideal para baños pequeños o si quieres que tu baño sea más funcional.
- La limpieza de un plato de ducha es más rápida y sencilla, las bañeras son más grandes y tienen más recovecos que una ducha.
- Los platos de duchas son más cómodos y evita accidentes. Debido al desnivel que tienen las bañeras, estas son más peligrosas y producen más accidentes que los platos de ducha.
¿Todavía estás pensando en poner bañera en casa? Seguro que con estas ventajas has cambiado de idea y terminas instalando un plato de ducha.